EVANGELIO DE HOY, MIÉRCOLES 16 DE OCTUBRE


EVANGELIO DE HOY 

MIÉRCOLES 16 DE OCTUBRE 

Lectura  Rom 2, 1-11


Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Roma.

Tú que pretendes ser juez de los demás ?no importa quién seas? no tienes excusa, porque al juzgar a otros, te condenas a ti mismo, ya que haces lo mismo que condenas. Sabemos que Dios juzga de acuerdo con la verdad a los que se comportan así. Tú que juzgas a los que hacen esas cosas e incurres en lo mismo, ¿acaso piensas librarte del Juicio de Dios? ¿O desprecias la riqueza de la bondad de Dios, de su tolerancia y de su paciencia, sin reconocer que esa bondad te debe llevar a la conversión? Por tu obstinación en no querer arrepentirte, vas acumulando ira para el día de la ira, cuando se manifiesten los justos juicios de Dios, que retribuirá a cada uno según sus obras. Él dará la Vida eterna a los que por su constancia en la práctica del bien buscan la gloria, el honor y la inmortalidad. En cambio, castigará con la ira y la violencia a los rebeldes, a los que no se someten a la verdad y se dejan arrastrar por la injusticia. Es decir, habrá tribulación y angustia para todos los que ha­cen el mal: para los judíos, en primer lugar, y también para los que no lo son. Y habrá gloria, honor y paz para todos los que obran el bien: para los judíos, en primer lugar, y también para los que no lo son, porque Dios no hace acepción de personas.
Palabra de Dios.

Comentario

“Pablo se dirige a un oyente imaginario que aplaude con entusiasmo su descripción del fracaso moral de los paganos. Ese tal no es mejor que el pagano, pues, pese a una cultura moral superior, no hace lo que cabría esperar que hiciera. Por tanto, no escapará al juicio divino” (J. A. Fitzmyer, Nuevo Comentario Bíblico San Jerónimo, Ed. Cristiandad).

Salmo Sal 61, 6-7. 9. 13


R. ¡Acuérdate de tu misericordia, Señor!

Sólo en Dios descansa mi alma, de él me viene la esperanza. Sólo él es mi Roca salvadora, él es mi baluarte: nunca vacilaré. R.
Confíen en Dios constantemente, ustedes, que son su pueblo, desahoguen en él su corazón, porque Dios es nuestro refugio. R.
El poder pertenece a Dios, y a ti, Señor, la misericordia. Porque tú retribuyes a cada uno según sus acciones. R.

Aleluya          Jn 10, 27

Aleluya. “Mis ovejas escuchan mi voz, yo las conozco y ellas me siguen”, dice el Señor. Aleluya.

Evangelio      Lc 11, 42-46


+Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Jesús dijo a los fariseos: “¡Ay de ustedes, fariseos, que pagan el impuesto de la menta, de la ruda y de todas las legumbres, y descuidan la justicia y el amor de Dios! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello. ¡Ay de ustedes, fariseos, porque les gusta ocupar el primer asiento en las sinagogas y ser saludados en las plazas! ¡Ay de ustedes, porque son como esos sepulcros que no se ven y sobre los cuales se camina sin saber!”. Un doctor de la Ley tomó entonces la palabra y dijo: “Maes­tro, cuando hablas así, nos insultas también a nosotros”. Él le respondió: “¡Ay de ustedes también, porque imponen a los demás cargas insoportables, pero ustedes no las tocan ni si­quiera con un dedo!”.
Palabra del Señor.

Comentario

¿Es posible que nos preocupemos más por el cumplimiento de pequeños preceptos y nos desentendamos de amar al hermano? ¿No nos pasa seguido que buscamos que los demás siempre estén agradeciéndonos y felicitándonos por “el bien que hacemos a la Iglesia”? Esto demuestra que a veces podemos olvidar que Jesús nos habla a nosotros.